lunes, 6 de octubre de 2008

Vida, meramente vida.


Como sé que la vida no tiene ningún sentido, ningún fin práctico y sólo es mera tragedia; entonces podría decirles que el elixir de la vida no es alcanzar la eternidad, sino vivir al máximo cada instante por más tormentoso que sea y no ser cobardes. ¡Vivan su propia tragedia, que siempre es bella!

1 comentario:

Anónimo dijo...

niego tu nihilismo,
y espero q el mio cese.